Aún no se si hice bien al desempolvar un libro ya leído
"Ás vezes, lá onde moro, "A veces, allí donde vivo,
fico a noite a olhar as estrelas como as do deserto Paso noches mirando las estrellas como las
e oiço o tempo passar, del desierto, y oigo el tiempo pasar,
mas nao me angustia mais: pero ya no me angustio:
eu sei que é justo e que tudo o resto é falso" yo se que es justo y que todo lo demás es falso"
Miguel Sousa Tavares "No teu deserto"
Cuánta razón tienen los buenos escritores.
Y es que en los nuevos tiempos que corren, la metafísica, las preguntas por el espacio y el tiempo, se han quedado cojas. El espacio ya no nos ayuda a saber qué y quienes somos.
En estos nuevos tiempos en los que el universo se nos revela como algo en constante expansión, sin fin.
Y tenemos como jardín el mundo, pudiendo recorrer en cuestión de horas miles de kilómetros, habiendo vivido en 5 años hasta en 5 ciudades diferentes, en 3 países distintos. El espacio ha dejado de ser un lugar seguro y familiar donde encontrarnos.
Por eso debemos bajarnos del frenesí que nos rodea, dejar de vivir demasiado deprisa, prolongar la infancia, perdernos en la adolescencia, disfrutar de la madurez, y dejarnos envejecer de manera sana. Disfrutar del tiempo, y dejar de verlo como un yugo, porqué él se revelará con su pasar, como el único capaz de revelarnos quiénes somos y quiénes fuimos . Es el único capaz de mostrarnos el verdadero sentido de las cosas, su verdadera magnitud. Que el tiempo pasa y seguirá pasando debe ser nuestra única certeza, todas las demás...el tiempo dirá.
Con esta entrada acabo con los desiertos por un tiempo, que últimamente nos persiguen
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